Esta semana el
periódico japonés Sponichi Annex dio a conocer que debido a la emergencia
sanitaria a causa del COVID-19, se están realizando conversaciones entre
televisoras sobre el retraso de animes programados para la temporada de verano
(julio) y otoño (octubre).
Según una cadena
de televisión, el anime tarda más tiempo el producirse que cualquier otro tipo
de programa. Por lo que, si la situación vuelve a la normalidad, los títulos de
anime no estarán listos para su transmisión.
Uno de los
procesos más afectados por la situación actual es la grabación de voz, ya que
implica reuniones de grupos en un entorno cerrado. Además, mucha de la carga de
trabajo se subcontrata a China y Corea del Sur, países que actualmente tienen
sus propias luchas relacionadas a la pandemia mudial.
Otros
departamentos afectados han sido los de fotografía y composición, que suele ser
la última línea de producción, donde el arte dibujado se digitaliza en una
computadora para ser limpiado y ensamblado en animación.
Finalmente, con el
posible retraso de las temporadas de verano y otoño, las ventas de productos promocionales y eventos
relacionados también tendrán que posponerse para que coincida con el
lanzamiento de los animes en caso de retraso.










No hay comentarios:
Publicar un comentario